Al atardecer


 La tarde avanza, como heraldo que pregona el fin de una jornada, pintando de tonos dorados el sol, que brillante resplandecía en el alba.

Ahora, anuncia la pronta llegada de la noche, con su vestido ataviado de estrellas, y con una voz tan suave que nos arrulla para complacer a Morfeo, haciéndonos caer como hojas durante el otoño, en las tierras donde los sueños nos aguardan.

Mientras nuestra tarde, también es el preludio del fin de la espera, para estar juntos y proveernos de esas caricias que con tanto cariño reservamos para nosotros, cuando la soledad vigile el umbral de nuestro aposento, mientras el amor cobijado por la pasión, nos aguarda en su lecho.

HugoHH2025 

Comentarios

Entradas más populares de este blog

A la luz de la luna

La mariposa en mi alma

La indicada